Getafe Frontal / edición nº 174
viernes 2 de noviembre de 2012 / de 14:30 a 15:30h.
Cerca de la estación de Getafe Centro, ya en el barrio de la Alhóndiga, la o el transeúnte despistado se sorprende al toparse con la calle Presidente Kennedy. Sorpresa hasta cierto punto si se rememora aquella España retratada en Bienvenido Mister Marshall y que parece seguir vigente.
De vuelta al siglo XXI y a pocos días de las elecciones en los Estados Unidos de Norteamérica -lo que las mentes entregadas a la humillante simplicidad del imperialismo yankee llaman América*- nos vestimos de barras y estrellas para detenernos en dos ejemplos de la relación amor-odio que mantiene Getafe (en general, el resto del planeta) con una super-potencia que no deja de ser un país aún adolescente (y que, de forma regular, desprecia a la Vieja Europa).
[* en esa categoría no se incluye la letra del "Soldadito boliviano" de Nicolás Guillén pero sí aquella portada cateta de El País con motivo del 11-S]
[* en esa categoría no se incluye la letra del "Soldadito boliviano" de Nicolás Guillén pero sí aquella portada cateta de El País con motivo del 11-S]
Como suelen decir Faemino & Cansado: "Estados Unidos, ese vasto país no sólo en tamaño". Por supuesto, los tópicos no pasan de ahí: Es de justicia reconocer que en EE.UU. hay vida inteligente, iniciativas interesantes, creatividad a raudales y gente que merece mucho la pena.
El primero de esos ejemplos de la citada y desequilibrada relación nos hace regresar al desafortunado segundo mandato de J. Mª Aznar y a la época del "No a la guerra" (que no ha perdido vigencia como concepto). Por entonces se organizaron Marchas a la Base Aérea de Getafe con un planteamiento claro:
"En Getafe se encuentra una importante base militar observada por el convenio militar con EEUU. Asímismo nuestro pueblo es sede de tres enormes empresas punta en tecnología aeronáutica. Cuando cuatro voceros se llenan la boca hablando de los derechos de los kurdos iraquíes, recordemos donde se fabrican armas que masacran a los kurdos de Turquía.
Hemos decidido movilizarnos en Getafe porque en este municipio la guerra se hace posible. En el término municipal se ubican al menos tres empresas clave del complejo militar industrial que nutre de material a quienes hoy apuestan por la vía de la guerra. Las empresas CASA y CESA -que forman parte de la Sociedad Europea Aeroespacial y de Defensa (EADS), y BÓREAS se dedican a fabricar componentes para aviones militares y armas en muchos de los casos producidas en Getafe.
Getafe cuenta con una Base Aérea sobre la que exigimos se tenga un exhaustivo control por si estuviera prestando apoyo logístico a la guerra. La firma del Convenio Bilateral de Defensa entre EE.UU. y el Estado español posibilita de hecho su utilización. Es hora de parar la guerra y desmilitarizar Getafe, que sufre de manera importante una presencia militar en su terriorio, con los terrenos que ocupa la Base Aérea y el Escuadrón de Enseñanza de Automoción de la avenida John Lennon.
No se puede decir No a la guerra y apoyar la OTAN. No se puede decir No a la guerra y tener ubicadas en nuestro municipio empresas productoras de armas. No se puede decir No a la guerra y obviar que desde la base aérea se puede estar colaborando mediante un apoyo logístico. No se puede acusar a quienes reclaman que se detenga la producción militar en Getafe de atentar contra los puestos de trabajo. Son los propios procesos de globalización económica los que poco a poco van diezmando los empleos".
En el otro extremo, la fascinación por el American Way of Life reencarnada en tienda (como no). Me refiero a Taste of America (pza. de Carretas, 3 de Getafe). En su escaparate y estanterías conviven botes de Dr. Pepper o Coke de vainilla, la plúmbea mantequilla de cacahuete, mostaza de Louisiana, kit para hacer brownies, marshmallows para la fogata de campamento, sopa de tomate warholiana, siropes varios, salsa Newman's (sí, la de Paul) y menaje poco visto por estos lares.
En cuanto a las inminentes elecciones, pasajes de artículos de Josep Ramoneda ("Romney, la apuesta por la lucha ideológica") y de Antonio Caño ("La huella de Obama"), ambos publicados en el diario El País.
Ah, y en lo musical: Brass band de Nueva Orleans, bluegrass, americana -es decir, country/pop- y blues/rock que, traducido a nombres propios, da como resultado Bela Fleck, Trombone Shorty, Tim O'Brian, Dixie Chicks, Kid Loco y el Bruce Springsteen de 2006 que homenajeó a Pete Seeger.
Ah, y en lo musical: Brass band de Nueva Orleans, bluegrass, americana -es decir, country/pop- y blues/rock que, traducido a nombres propios, da como resultado Bela Fleck, Trombone Shorty, Tim O'Brian, Dixie Chicks, Kid Loco y el Bruce Springsteen de 2006 que homenajeó a Pete Seeger.